¿Hay algo más transformador que la participación de la ciudadanía en pro de un nuevo modelo energético?
Desde aquí creemos que las personas comprometidas con el bien común son el motor capaz de construir no sólo un modelo energético descarbonizado y sustentado en renovables responsables sino también, todo un nuevo modelo ecosocial feminista, cooperativo, justo, equitativo, solidario y donde no se superen los límites biofísicos del planeta, respetándose la vida en todas sus formas.
Un modelo en el que las personas y su bienestar prevalezcan sobre el capital y los oligopolios y en el que la democracia sea participativa, transparente y horizontal.
Puede parecer una utopía y, sin embargo, es el ADN de nuestra entidad. Una empresa de no lucro donde los excedentes son revertidos a la sociedad en su conjunto, apoyando e impulsando proyectos sociales y ambientales que permitan cumplir con la co-responsabilidad que tenemos con este planeta, con nuestro hogar.
Economía social y solidaria al servicio de las personas y no personas al servicio del neoliberalismo. Por ello, desde hace 13 años, tenemos el sueño de convertir a toda la ciudadanía en productora de energía fotovoltaica ya sea como autoproductora en su vivienda o participando en una de las plantas que hemos socializado.
Ya se han sumado a esta otra forma de concebir el mundo más de 3.300 personas, alcanzándose grandes hitos como los que se reflejan a continuación:
¡Ya tenemos 4,61 MW de potencia fotovoltaica instalada en las 84 plantas comunitarias!
Las 3.300 personas que participan están generando energía renovable de forma comunitaria pero también están poniendo sus ahorros en concordancia con sus ideales. Rentabilidad y ética se dan la mano para permitir este triple balance positivo social, ambiental y económico.
Una rentabilidad de hasta el 5%, después de impuestos, que se materializa en el reparto de más de 2 millones de euros entre nuestra comunidad. De éstos, más de medio millón se corresponden a la rentabilidad de proyectos sociales y ambientales que hemos podido apoyar gracias a las 3.369 participaciones. Iniciativas tan especiales como Enciende Refugio junto a la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Orgullo Solar con la Fundación 26 Diciembre, Huerta Solar Amigos de la Tierra con Amigos de la Tierra o DeSEOsol junto a SEO Bird/Life, etc. Proyectos tan necesarios e imprescindibles que a través de la socialización de plantas fotovoltaicas se transforman en Energía que Conquista Derechos.
Los Derechos se Conquistan en Comunidad.
Actualmente nos encontramos socializando de manera comunitaria nuestra planta 84. Ésta, la Huerta Solar Urbana 70, se encuentra ubicada en Massamagrell (Valencia) y tiene una potencia instalada de 80 kW que generará 117.129 kW/año, durante los próximos 23 años, o lo que es lo mismo, el equivalente al consumo anual de 805 familias, evitando así, la emisión de 2.247,33 tCO2.
Buena energía que contagia y permite impulsar un nuevo modelo energético desde lo común, desde la socialización y el apoyo mutuo.
¿Te sumas a la Revolución Solar?
