El hecho de participar en una planta de energía fotovoltaica con tus ahorros consigue exactamente lo que tú decides: generar energía renovable, promover la participación ciudadana en el sistema energético y apoyar un modelo económico más respetuoso con el medio ambiente y con las personas. ¿Quieres más razones para invertir en energía solar con Ecooo? Aquí te damos algunas más.
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Razón 1. Es una inversión segura con una rentabilidad razonable, entre el 2,3% TIR antes de impuestos y el 5,3% TIR aproximado antes de impuestos, en función de la inversión que elijas, que recibes año a año
Generalmente los productos de inversión en la banca convencional consisten en que depositas tus ahorros y no los vuelves a ver hasta dentro de 10 años. Cuando inviertes en renovables con Ecooo, además de invertir el mundo, y contribuir a que sea más respirable y limpio, recibes los rendimientos cada trimestre o cada año, dependiendo de la forma de inversión que elijas:
- Inversión a corto plazo: tiene una inversión mínima de 1000 euros y dura entre 2 y 10 años. Se liquida de manera trimestral y tiene una rentabilidad garantizada del 2,3% TIR antes de impuestos (2% TIR después de impuestos) si inviertes de 2 a 5 años y del 3,3% TIR antes de impuestos (3% TIR después de impuestos) si inviertes de 5 a 10 años.
- Inversión a largo plazo: tiene una inversión mínima de 1000 euros y dura la vida útil de la planta fotovoltaica. Recibes liquidaciones de manera trimestral o anual, dependiendo de la cantidad invertida y tiene una rentabilidad aproximada del 5,3% TIR antes de impuestos (4,5% TIR después de impuestos).
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Razón 2. Frente al oligopolio energético y generas tu propia energía
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En nuestro país está habiendo una auténtica revolución de renovables, especialmente de fotovoltaica, sin embargo, en el tablero siguen jugando las cinco empresas de siempre. El MITECO tenía hasta el 25 de enero de 2023 para resolver las declaraciones de impacto ambiental (DIA) de un paquete de 202 proyectos que cuentan con el permiso para conectarse a la red eléctrica, requisito indispensable para que puedan operar. De esos 202, 152 han recibido el visto bueno ambiental , es decir, una DIA positiva. Suman una potencia de 27.943 MW y la mayoría son plantas fotovoltaicas: 130, con una potencia total de 24.752 MW. Además, hay 20 eólicos con DIA positiva (2.897 MW) y dos híbridos (294 MW).
No existe una base de datos donde se pueda consultar dicha información, donde se publica la resolución de esos expedientes. Los macroproyectos de renovables con permiso ambiental se extienden por 243 municipios, con una especial presencia en las provincias de Madrid, Toledo y Valladolid en el caso de las instalaciones solares. Respecto a los promotores, 36 grandes empresas y fondos están detrás de los proyectos autorizados, entre los que destacan Iberdrola, Enel y TotalEnergies. Más de la mitad de los proyectos (72) los llevarán a cabo empresas de capital extranjero. La italiana Enel (dueña de Endesa) es la que más ha conseguido: 14 fotovoltaicos y seis eólicos. La francesa TotalEnergies tiene otros 12 y la austriaca Verbund AG, ocho. Al menos tres proyectos están controlados por fondos de inversión con sede en Luxemburgo. Solo hay una empresa no europea: el grupo saudí Al Fanar, centrado en el sector eólico.
Entre las españolas destacan los 17 proyectos de Iberdrola (tres eólicos) y los cinco de Solaria, propiedad de Enriquez Díaz Tejeiro, una de las 100 personas más ricas de España. Entre los nombres conocidos que están invirtiendo en este tipo de instalaciones está también el de Javier Botín, hijo del expresidente del Banco Santander, uno de los bancos que más invierte en energías fósiles. A través de la sociedad de gestión de activos que controla junto al dueño de la metalúrgica Sindenor (Juan Antonio Jainaga) ha conseguido el permiso para el parque fotovoltaico Zalea, cerca de Málaga. Además, muchos de estos grandes bancos participan en el negocio de la venta de armas o apoyan conflictos como el de Israel.
El oligopolio quiere acumular beneficios desmedidos a costa de que pague la ciudadanía. ¿Qué podemos hacer frente a eso? Invertir en renovables en plantas socializadas de Ecooo, para que la energía esté cada vez en manos de más gente.
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Razón 3. Tener tus ahorros en un banco convencional implica que tienes cero control sobre qué hacen con ellos
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Que tus ahorros acaben siendo un kalashnikov o una mina de carbón no es tan difícil. Invertir en energía solar con Ecooo es una inversión segura, no financiera y no especulativa. Las inversiones en plantas fotovoltaicas de Ecooo son tangibles. Puedes acceder a los datos de producción real de tu planta cuando quieras. Pero además la energía solar nos hace menos dependiente de los mercados financieros. Liberarnos de la dependencia energética nos da autonomía económica. Por ejemplo, entre los años 2016 y 2021 el Banco Santander ha financiado más de 42 mil millones a proyectos de energía fósil como minas de carbón o proyectos de fracking de petróleo y gas. El BBVA más de 26 mil millones.
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Razón 4. Es una inversión en economía real
Generas energía eléctrica renovable y recibes una retribución por su venta. Las inversiones en Ecooo significan participar en una planta solar fotovoltaica construida entre los años 2007 y 2014 que vende energía a la red eléctrica y que además, recibe unas cuantías razonables en lo que se denominan primas. Es por tanto una inversión en economía real en un bien tangible: la venta de energía solar fotovoltaica.
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Razón 5. Evitas emisiones de CO2 a la atmósfera
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La energía solar fotovoltaica es el futuro energético. Cuanto antes contribuyamos todos y todas a su implementación, antes conseguiremos mitigar el cambio climático. No solo ofrece buena rentabilidad, sino una inversión que vale la pena, que cuida el planeta. La energía solar no genera emisiones de gases de efecto invernadero. Si inviertes en energía solar, contribuyes a reducir los gases de efecto invernadero. La energía solar ha contribuido a reducir las emisiones de CO2 en la Unión Europea en 73 millones de toneladas en 10 años. En Ecooo hemos evitado más de 47.000 toneladas de CO2.
