Ayudas y subvenciones para instalar aerotermia

26/09/24 | ECONOMÍA

Incentivos económicos para instalar aerotermia

La inversión que hay que realizar tiene garantizada una serie de ayudas y subvenciones para instalar aerotermia. consigo una serie de ayudas y subvenciones. Hay que tener en cuenta en la inversión en reducción de la demanda de calefacción y refrigeración y en el consumo de energía no renovable son desgravables en la declaración de renta (entre un 20 y un 60% de la inversión en función de las circunstancias concretas de la vivienda). Además, hay comunidades autónomas y ayuntamientos que ofrecen beneficios adicionales en forma de ayudas a la rehabilitación y en bonificaciones en impuestos municipales. En conjunto estas ayudas pueden suponer una parte muy importante del presupuesto.

La inversión en aerotermia puede formar parte de la rehabilitación energética integral de una vivienda unifamiliar o bloque de pisos (añadiendo el aislamiento de la envolvente del edificio, el cambio de ventanas, la iluminación, la instalación de paneles solares u otras energías renovables y de cargadores para el coche eléctrico), y en ese caso las ayudas al paquete completo pueden alcanzar hasta el 80% del coste total.

Entre unas cosas y otras, lo que está garantizado es que la inversión se amortiza mucho antes de que termine la vida útil de los equipos de aerotermia, que actualmente es de dos décadas, gracias a las ayudas y subvenciones para la instalación de aerotermia.

El ahorro derivado de la adopción de la aerotermia puede reducirse siquiera ligeramente por la eventual necesidad de aumentar la potencia contratada, concepto fijo del recibo de la luz que, como recordábamos en el post para entender la factura de la luz, forma parte de la base imponible que sirve para calcular los importes de los impuestos, el Especial sobre la Electricidad (IEE) y el del Valor Añadido (IVA).

Por ejemplo, en la declaración de la renta, para la desgravación de la instalación de aerotermia, se establece una base máxima anual de 5.000 € sobre la base estatal. Puedes deducirte el 60% de esa cantidad, lo que equivale a 3.000 € por ejercicio fiscal. En total, esta deducción puede aplicarse durante tres ejercicios, lo que permite deducir hasta 9.000 € del coste total de la instalación. Esto es en el caso de que haya un único titular.

Sin embargo, si la vivienda está a nombre de dos personas y ambas presentan su declaración de la renta por separado, cada titular puede deducirse el 60% de la instalación. Esto significa que, en conjunto, podrían deducirse alrededor de 10.000 € en total. Estas deducciones forman parte del paquete de medidas lanzado por el Gobierno de España en 2021, el cual ha sido renovado y actualizado cada año. Las medidas actuales estarán vigentes hasta el 31 de diciembre. Para más información, no dudes en llamarnos.

¿Cuál es la situación actual de la aerotermia en España?

A falta de mejores datos, se estima que entre el 10% y el 21% del parque residencial cuenta con aerotermia, y ello a pesar de que el Código Técnico de Edificación lo recoge desde 2019. España, pues, está en el furgón de cola de esta reforma tan necesaria por la que, por cierto, la Unión Europea apostó fuertemente en 2023 mediante la Directiva de Eficiencia Energética: las calderas de todo tipo deberán haber pasado el testigo a las bombas de calor en 2040.

Aerotermia Ecooo Annual-heat-pump-sales-to-2023_EHPA

[El gráfico puede encontrarse aquí]

Con todo, los caldereros de gas natural y otros combustibles han optado por resistir: su propuesta es la de apostar por los gases renovables (principalmente, biometano), asegurando que las calderas actuales sólo necesitarían algunos retoques menores.

En plena batalla entre la urgencia de los cambios para luchar contra el cambio climático y la resistencia a los mismos, la aerotermia no se ha librado de las campañas de los segundos: el principal, que las bombas de calor no son eficientes en países con climatología fría. En el gráfico de arriba se puede observar que los primeros de la tabla no son precisamente países mediterráneos, lo que podría terminar con el debate. Pero, por si hiciera falta, merece la pena leer este paper’ en el que se concluye que, incluso con temperaturas de 30ºC bajo cero, el desempeño de estos aparatos es significativamente mejor que el de sus competidores basados en los combustibles fósiles.

Genoveva López